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CARTAS DESDE LA ESPERANZA
LA TERAPIA QUE
SANA Y FORTALECE
El amor marca el origen y el fin
de la existencia humana. Y eso
lo sentimos en lo más profundo
de nuestro corazón. Y la mero de todo, definir cuál es y cómo se define la
realización de este amor nos misma. Posteriormente los expertos en cada ma-
teria sea sicológica o espiritual podrán ayudar.
libera de muchas ataduras como Me refiero más a la salud espiritual, que se
el miedo y la ansiedad. manifiesta como experiencia del creyente en Je-
sucristo y en la enseñanza de la Iglesia como ca-
mino de madurez, no sólo espiritual sino que
― también lo aporta como ayuda a lo corporal y a lo
MONS. FRANCISCO PÉREZ psicológico. Con la serenidad interior se sobre-
ARZOBISPO DE PAMPLONA - TUDELA llevan mucho mejor las circunstancias que toca
vivir, sean gozosas o sean dolorosas. Desde el
punto de vista antropológico sabemos que siem-
pre surge una pregunta que todos nos hacemos
en muchos momentos de la vida: “¿De dónde ven-
nte las diversas y múltiples enfer- go?” Y la respuesta, ya inscrita en lo más íntimo
medades que hoy se detectan, hay de nuestro ser, responde que nacemos del Amor
una que debe ser atajada de modo y estamos llamados para amar. Nuestro ser per-
especial y es la ansiedad, que es sona está cualificado esencialmente por el amor.
una reacción humana que afecta a El amor marca el origen y el fin de la existen-
la mente y al cuerpo. Situaciones cia humana. Y eso lo sentimos en lo más profun-
A como las que vivimos actualmente do de nuestro corazón. Y la realización de este
hacen mella con mayor facilidad en
las personas, dando paso a sentimien-
tos como la soledad, el miedo, la in-
certidumbre y la tristeza. Muchos se Con la serenidad interior se sobrellevan
preguntan si se logrará conseguir una mucho mejor las circunstancias que toca
terapia para curar dichas limitaciones vivir, sean gozosas o sean dolorosas.
y afecciones que entorpecen la vida
en su día a día. Se paraliza la mente y
los resortes afectivos disminuyen. No hay mo- amor nos libera de muchas ataduras como el
mentos de serenidad sino que todo está sujeto a miedo y la ansiedad: “La paz os dejo, mi paz os
estas limitaciones. Se puede pensar que hacer doy; no os la doy como la da el mundo. No se tur-
una descripción de esta manera tan clara contra- be vuestro corazón, ni se acongoje” (Jn 14, 27).
dice el sentido de la positividad y anula la mirada De ahí la importancia que tiene el relacionarnos
hacia la esperanza. ¡Todo lo contrario! Sabemos con Dios a través de la plegaria y encontrarle en
que para curar una enfermedad conviene, lo pri- el silencio interior para fortalecernos en el amor
4 • LA VERDAD
