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EDITORIAL

QUE POR TU SANTA

CRUZ REDIMIMSTE

AL MUNDO

―
ALFREDO URZAINQUI pos que han quedado seducidos y marcados por
el amor del crucificado. Es el amor de Dios. El
gran mensaje que porta la Iglesia en el suceder
de todos los tiempos.
La Pasión de Jesucristo, sus últimas horas
Por qué murió Jesús? No es fácil res- agónicas y su muerte ha suscitado y suscita, ne-
ponder a esta pregunta porque la cesariamente, piedad hasta en los corazones
muerte del hombre es un misterio. Pa- más duros. “Tanto amó Dios al mundo que en-
ra empezar a responder algo hay que tregó a su Hijo único”, dirá Juan. Cristo murió
¿ recurrir a las palabras de Jesús en la por amor al hombre. Ésta es la verdad. Aún
noche del Jueves Santo: “Esto es mi cuerpo que cuando el hombre no quiere recibir el amor, aún
será entregado por vosotros”. “Ésta es mi san- cuando el hombre cierra las puertas de su cora-
gre que será derramada por vosotros, para el zón, Dios sigue llamando a las puertas de sus co-
perdón de los pecados”. Ésta es la clave. En el razones y con la cruz en las manos les dice: Si no
misterio de la vida de Dios y del hombre está el crees en nada, ni entiendes nada, por lo menos
misterio del mal, del absurdo, de la muerte, del mírame que estoy sufriendo y muriendo por ti.
alejamiento rebelde de Dios que destruye al ¿Por qué Jesús quiere demostrarnos tanto este
hombre. El hombre libremente se puede colocar amor? porque el amor es invenciblemente fuer-
en este bando del mal, seducido por sus menti- te contra el pecado, contra el odio, contra el do-
ras y placeres falsos que engañan. Jesús redime lor y el sufrimiento. Sólo salva el amor, sólo nos
al hombre con su muerte. De alguna
manera Jesús entra en el mal, “se hi-
zo pecado” dice Pablo, para rescatar- Cristo murió por amor al hombre.
nos. Ésta es la verdad, aún cuando el hombre
La Semana Santa nos introduce no quiere recibir el amor.
en la hora de amor de Jesús.
Desde aquella hora del primer
Viernes Santo, único en la historia, muchos hom- curará su amor.
bres y mujeres de todos los tiempos y lugares, Aquí tenéis, en la revista “La Verdad”, un hu-
de todas las épocas y culturas, han quedado to- milde servicio para que os ayude a vivir estos dí-
cados por esta hora de Jesús. Millones y millones as santos. En la comunión de la Iglesia acompa-
de hombres y mujeres han descubierto el fondo ñemos al Señor estos días, particularmente en
de aquella hora del calvario. Han descubierto un los oficios litúrgicos y en las procesiones y ejer-
amor nuevo, distinto, infinito e insospechado cicios de piedad. Para después exultar con el ale-
que ha logrado transformar vidas, llenar de luya pascual, por la victoria del Señor, y celebrar
amor muchos corazones, curar tantas heridas, así su santa Resurrección.
salvar tantas almas. Son los santos, los mártires, ¡Feliz Semana Santa y Feliz Pascua en la
los buenos y santos cristianos de todos los tiem- Resurrección del Señor! ❏

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