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«Señor, si mi hermano me ofende, agarrándolo, lo estrangulaba dicien-
¿cuántas veces tengo que perdonar- do: "Págame lo que me debes".
lo? ¿Hasta siete veces?». El compañero, arrojándose a sus
Jesús le contesta: «No te digo hasta pies, le rogaba diciendo: "Ten pa-
siete veces, sino hasta setenta veces ciencia conmigo y te lo pagaré".
siete. Pero él se negó y fue y lo metió en la
Por esto, se parece el reino de los cárcel hasta que pagara lo que de-
cielos a un rey que quiso ajustar las bía. Sus compañeros, al ver lo ocu-
cuentas con sus criados. Al empezar rrido, quedaron consternados y fue-
a ajustarlas, le presentaron uno que ron a contarle a su señor todo lo su-
debía diez mil talentos. Como no te- cedido. Entonces el señor lo llamó y
nía con qué pagar, el señor mandó le dijo: "¡Siervo malvado! Toda
que lo vendieran a él con su mujer y aquella deuda te la perdoné porque
sus hijos y todas sus posesiones, y me lo rogaste ¿no debías tener tú
que pagara así. también compasión de tu compañe-
El criado, arrojándose a sus pies, le ro, como yo tuve compasión de ti?".
suplicaba diciendo: "Ten paciencia Y el señor, indignado, lo entregó a
conmigo y te lo pagaré todo". los verdugos hasta que pagara toda
Se compadeció el señor de aquel la deuda.
criado y lo dejó marchar, perdonán- Lo mismo hará con vosotros mi Pa-
dole la deuda. Pero al salir, el criado dre celestial, si cada cual no perdona
aquel encontró a uno de sus compa- de corazón a su hermano». ❏
ñeros que le debía cien denarios y,

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