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bitos pero no nos podemos extender vestir al desnudo, visitar a los enfer-
ante tan corta respuesta. mos, visitar a los presos y enterrar a
Como he expuesto previamente, los muertos… Es el testimonio de la
hay otra realidad de la Iglesia y es su caridad fraterna” (Catecismo de la
colaboración y servicio a la sociedad. Iglesia Católica, nº 2447).
Pensemos en los misioneros que, tan- Hemos de añadir a este gran ser-
to bien, ejercen en lugares donde se vicio de caridad el hecho que la Igle-
ha perdido la dignidad humana y allí sia –en todas las Diócesis- trabaja por
van para darse y entregarse a favor los pobres a través de Cháritas. Ayu-
de los demás. En España hay más de damos a miles de personas que se en-
9.000 misioneros que trabajan en los cuentran atormentadas por no tener
ambientes más necesitados de edu- ni siquiera lo más imprescindible. Es-
cación, de salud, de auxilios materia- pero que esta respuesta la ayude a
les como la comida y el vestido. “Las saber cómo intentamos vivir los cris-
obras de misericordia son acciones tianos católicos que pertenecemos a
caritativas mediante las cuales ayu- la Iglesia, teniendo presente también
damos a nuestro prójimo en sus ne- que –como frágiles y pecadores que
cesidades corporales y espirituales. somos- muchas veces no realizamos
Instruir, aconsejar, consolar, confor- bien lo que se nos ha encomendado.
tar, son obras de misericordia espiri- No obstante confiamos en la miseri-
tual, como también lo son perdonar y cordia de Jesucristo que nos invita a
sufrir con paciencia. Las obras de mi- pedir perdón y a saber perdonar. To-
sericordia corporales consisten espe- do lo que sea hacer el bien venga de
cialmente en dar de comer al ham- donde venga es necesario y la Iglesia
briento, dar techo al que no lo tiene, lo intenta hacer: ¡Bienvenido sea! ❏

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